Nunca jamás comeré tomates

Juan presenta a su hermana Tolola en este libro. Ella es pequeña y divertida. Y muy particular con la comida. No le gusta casi nada, pero sobre todo odia los tomates. Un día, Juan le hace un truco para poder darle la cena. Se idea formas, procedencias y divertidos orígenes de cada uno de los alimentos que su hermana detesta y esta cae en la "trampa", comiéndoselos con gusto y disfrutando de todos. De todas formas, será Tolola la que acabe sorprendiendo a Juan con un final inesperado.